ÁRBOLES ARTIFICIALES

Los árboles artificiales se han convertido con el paso del tiempo en una excelente opción para decorar el hogar, ya en el post sobre plantas se habló de las ventajas en términos de higiene que tiene este tipo de elementos y que se replica en los protagonistas de este artículo.

Son ni más ni menos que réplicas de ejemplares reales hechas de plástico empleados para simularlos en el seno de la decoración de una vivienda o casa. A su favor juega la amplia variedad de clases que se pueden encontrar hoy en día que, además, se adaptan a todo tipo de sensibilidades y estilos.

Tipos de árboles artificiales

Como ya se ha dicho, hay un gran repertorio de tipos diferentes de este componente decorativo, hasta el punto de que hay dos clasificaciones posibles sobre ellos: según su diseño y su uso.

Árboles Artificiales Diseño

Desde este punto de vista, los árboles artificiales se pueden clasificar de la siguiente manera:

Bambú: en el mercado los hay de diferentes formatos y su hábitat son los espacios interiores que cuentan con una ambientación oriental.
Ficus: son de los más empleados ya que se comercializan diseños de cualquier tamaño, tanto para interior como para exterior.
Plataneras: se distinguen por tener unas hojas muy grandes y anchas, por lo que son idóneas tanto para interior como para exterior.
Olivos: al igual que el blanco pega con todo, esta clase de árbol hace lo propio con todo en interior merced a su estética.
Bonsáis: se comercializan generalmente en miniatura y es habitual verlos en decoraciones orientales para crear una atmósfera de paz.
Palmeras: son de los ejemplares más grandes que existe, por lo que su lugar habitual es la decoración exterior con gran cantidad de espacio vacío alrededor.

Árboles Artificiales por Uso

Como se puede deducir de la anterior clasificación, cada uno requiere de un escenario concreto para brillar como merece y de un uso específico. Dicho esto, desde este punto de vista se distinguen los siguientes tipos:

De exterior: se componen de materiales muy resistentes con el fin de evitar que la climatología los deteriore, en especial las lluvias y el sol.
De interior: son de los más versátiles, ya que se pueden emplear en la práctica totalidad de estilos decorativos, lo cual está influenciado por los muchos y variados aspectos estéticos que puede presentar.
Para oficina: se puede decir que están pensados para que no llamen mucho la atención, ya que sus diseños son sencillos y favorecen una atmósfera de concentración más que otra cosa.

Para restaurantes: al igual que los de interior, presenta una inmensa variedad de diseños. Eso sí, son réplicas más auténticas de árboles reales.

Criterios para elegir el árbol artificial más adecuado

La clave para dar con el árbol artificial adecuado pasa por dos puntos: el primero es nuevamente el diseño, y el segundo es el ambiente que se pretenda crear. La simbiosis de ambos es esencial para sacarle todo el partido. Para que el lector tenga una referencia, las plataneras, los olivos y las bananeras pegan con todo. Si eres de los/as que ama la tranquilidad, un bonsái o un bambú es lo mejor en ese caso.

Ya ha llegado a su fin esta entrada de eljardíndelaabuela.com sobre los árboles artificiales. Ojalá que haya sido una buena guía para decorar vuestro hogar de la manera más bonita posible. Nos leemos a la próxima.